Belisario, un lugar de culto
Algunos lugares se reciclan, se modernizan, se reequipan, se reestructuran para adaptarse a las nuevas necesidades y demandas del mercado. A esta altura, resulta común la desaparición de antiguos cines, fábricas, talleres, mercados frente al advenimiento de magnos shoppings, discotecas o spas. Afortunadamente, este no es el caso del Piccolo Teatro -como indica su nombre-, un pequeño espacio teatral ubicado en Corrientes al 1600, por donde pasaron muchos talentos del teatro off de Buenos Aires.
La sala se volverá a inaugurar, hoy, totalmente renovada y con nombre nuevo, Belisario. Llamada así en homenaje al notable poeta y autor teatral Belisario Roldán (1873-1922) -autor de piezas como "El puñal de los troveros" y "El rosal de las ruinas"-, estará destinada al teatro, la danza, la música y el cine, entre otras actividades. La iniciativa de este proyecto corre por cuenta de Marcelo Savignone, uno de los actores que conoció de memoria cada rincón del Piccolo, ya que en los últimos seis años interpretó allí el espectáculo de improvisación "Sucesos Argentinos", (junto a Oscar Guzmán, Romina Coccio y Omar Argentino Galván).
"La idea es generar un espacio agradable para la cultura, que sea muy ecléctico, pero a la vez artístico. Intentaremos mezclar lo comercial con el riesgo que implica encarar proyectos artísticos independientes. Los martes será jornada de cine; los miércoles habrá danza; los jueves llegará el turno de la música, la cantante y pianista Carmen Baliero abrirá con la presentación de su CD; y los viernes y sábados se dedicarán exclusivamente al teatro. Para los domingos organizaremos ciclos de dos meses donde se le dará la posibilidad de actuar a aquellas bandas que sean off del off", apunta Marcelo Savignone, quien debutó en televisión, con "Delicatessen", ciclo trasmitido por América en 1998.
Además, el actor prepara el estreno de "La Esperata", un unipersonal con libro y música propia, que podrá verse desde abril, los domingos. "Es un gran desafío porque si bien hay un target de público que ya me conoce por ‘Sucesos...’, este trabajo es totalmente diferente a lo que hice anteriormente. Se trata de una pieza tragicómica, que apela mucho a la actuación y a la música, ya que son los únicos instrumentos sobre la escena", define Savignone, quien también protagonizará los sketches de "La biblia y el calefón" y "Peor es nada", ambos ciclos de Jorge Guinzburg.
Las obras que también integrarán la lista de programación del Belisario son "El caso Piniataro Sánchez", dirigido por Tony Lestingi; "El cosmonauta agrícola", con dirección de Claudio Martínez Bel; y "Sucesos en swing".
Para este proyecto que lo posiciona como dueño y director artístico, Savignone eligió como padrinos artísticos a Hugo Arana y a su esposa, la actriz MarzenKa Novak. "Es un honor y una gran alegría la apertura de un espacio creador, donde se pueden permitir -no como los grandes teatros comerciales- manifestaciones variadas sin tener una dependencia tan grande del afuera masivo", -afirma el actor y director, que tiene una opinión formada respecto de la necesidad de crear espacios artísticos-. "Más de una vez, pensé que si los vietnamitas pudieron vivir, criar hijos, comerciar y desarrollarse durante cincuenta años debajo de las bombas, cómo no vamos a poder nosotros. Frente a este panorama, en términos generales desesperanzado y con muchísima gente frente a las embajadas tramitando visas de doble nacionalidad para irse del país, uno puede advertir -por otro lado- cuántos cientos, miles, millones intentan, tratan y quieren construir. El hecho de sea la gente joven y talentosa como Marcelo, la que se pone al frente de nuevos emprendimientos culturales, robustece la idea de que no todo está perdido". Está reciclado.
La sala se volverá a inaugurar, hoy, totalmente renovada y con nombre nuevo, Belisario. Llamada así en homenaje al notable poeta y autor teatral Belisario Roldán (1873-1922) -autor de piezas como "El puñal de los troveros" y "El rosal de las ruinas"-, estará destinada al teatro, la danza, la música y el cine, entre otras actividades. La iniciativa de este proyecto corre por cuenta de Marcelo Savignone, uno de los actores que conoció de memoria cada rincón del Piccolo, ya que en los últimos seis años interpretó allí el espectáculo de improvisación "Sucesos Argentinos", (junto a Oscar Guzmán, Romina Coccio y Omar Argentino Galván).
"La idea es generar un espacio agradable para la cultura, que sea muy ecléctico, pero a la vez artístico. Intentaremos mezclar lo comercial con el riesgo que implica encarar proyectos artísticos independientes. Los martes será jornada de cine; los miércoles habrá danza; los jueves llegará el turno de la música, la cantante y pianista Carmen Baliero abrirá con la presentación de su CD; y los viernes y sábados se dedicarán exclusivamente al teatro. Para los domingos organizaremos ciclos de dos meses donde se le dará la posibilidad de actuar a aquellas bandas que sean off del off", apunta Marcelo Savignone, quien debutó en televisión, con "Delicatessen", ciclo trasmitido por América en 1998.
Además, el actor prepara el estreno de "La Esperata", un unipersonal con libro y música propia, que podrá verse desde abril, los domingos. "Es un gran desafío porque si bien hay un target de público que ya me conoce por ‘Sucesos...’, este trabajo es totalmente diferente a lo que hice anteriormente. Se trata de una pieza tragicómica, que apela mucho a la actuación y a la música, ya que son los únicos instrumentos sobre la escena", define Savignone, quien también protagonizará los sketches de "La biblia y el calefón" y "Peor es nada", ambos ciclos de Jorge Guinzburg.
Las obras que también integrarán la lista de programación del Belisario son "El caso Piniataro Sánchez", dirigido por Tony Lestingi; "El cosmonauta agrícola", con dirección de Claudio Martínez Bel; y "Sucesos en swing".
Para este proyecto que lo posiciona como dueño y director artístico, Savignone eligió como padrinos artísticos a Hugo Arana y a su esposa, la actriz MarzenKa Novak. "Es un honor y una gran alegría la apertura de un espacio creador, donde se pueden permitir -no como los grandes teatros comerciales- manifestaciones variadas sin tener una dependencia tan grande del afuera masivo", -afirma el actor y director, que tiene una opinión formada respecto de la necesidad de crear espacios artísticos-. "Más de una vez, pensé que si los vietnamitas pudieron vivir, criar hijos, comerciar y desarrollarse durante cincuenta años debajo de las bombas, cómo no vamos a poder nosotros. Frente a este panorama, en términos generales desesperanzado y con muchísima gente frente a las embajadas tramitando visas de doble nacionalidad para irse del país, uno puede advertir -por otro lado- cuántos cientos, miles, millones intentan, tratan y quieren construir. El hecho de sea la gente joven y talentosa como Marcelo, la que se pone al frente de nuevos emprendimientos culturales, robustece la idea de que no todo está perdido". Está reciclado.
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